El programa VENOM de la Fuerza Aérea de EE.UU. avanza en la modificación de los últimos F-16 para volar autónomamente

Fecha:

En el curso de la semana pasada, la Fuerza Aérea de EE.UU. (USAF) informó que ha sido recibido en la Base Aérea de Eglin el último caza F-16 Fighting Falcon destinado a integrar las nuevas modificaciones que le permitirían realizar vuelos autónomos, enmarcándose ello en el programa VENOM de la fuerza. La aeronave en cuestión arribó a dicha base el 1 de abril, sumándose de esta manera, a otros tres aviones del mismo modelo que se encuentran sometidos a los trabajos correspondientes para la incorporación de estas capacidades.

Refiriéndose a esta novedad, el mayor Trent McMullen, quién actualmente se desempeña como jefe de la división de capacidades avanzadas del 40.º Escuadrón de Pruebas de Vuelo, manifestaba: “Modificar la aeronave es el resultado de una rigurosa fase de diseño y nos acerca un paso más a probar la autonomía en un avión de combate con sistemas y capacidades de misión reales.” La USAF a su vez comunicaba: “Un nuevo cambio físico en la aeronave será la inclusión de un acelerador automático. Esta modificación permite que el VENOM de vuelo autónomo regule las superficies de control de vuelo y el empuje.”

Cabe mencionarse que mientras estos trabajos se llevan a cabo, los efectivos de la institución en Eglin se encuentran realizando un amplio abanico de simulaciones para poner a prueba los elementos que darían a los F-16 la pretendida autonomía en vuelo, iniciando con vuelos de combate uno contra uno y posteriormente de dos contra dos. Además, se ha informado que las plataformas participaron de simulaciones de escenarios donde el combate ocurre más allá del alcance visual, todo ello a fines de brindar nuevos datos a los técnicos que desarrollan el programa VENOM.

Una vez que esta serie de pruebas simuladas finalice, los sistemas pasarán a una nueva serie de testeos de hardware y software, donde se buscará verificar la correcta sincronización de ambos con los sistemas de la aeronave. Agregado a ello, se evaluará en un simulador si las capacidades de autonomía de la plataforma respetan los límites operacionales programados; siendo un ejemplo ilustrativo el tope de altitud, el cuál debería respetarse incluso si autónomamente se envía un comando de superarlo. Esto se realiza con el objetivo de garantizar la integridad del avión y del piloto (que supervisará su desempeño) en las posteriores pruebas reales.

Por último, cabe recordar que el ambicioso programa muestra estos avances en un plazo de tiempo relativamente corto, lo que es sin dudas un éxito para el mismo. En términos concretos, se espera que la primera aeronave F-16 ya modificada pueda estar disponible para pruebas en tan sólo 18 meses desde su arribo a la Base de Eglin, lo que ha sido posible en gran medida gracias al trabajo simultáneo de pilotos y técnicos de diferentes departamentos en una misma ubicación.

*Créditos de las imágenes: Samuel King Jr.

Te puede interesar: El Comando de Operaciones Especiales de la Fuerza Aérea de EE.UU. recibió sus primeros aviones de ataque OA-1K Skyraider II

Publicidad

Redaccion
Redaccionhttp://www.elestrategico.com
Equipo de redacción de El Estratégico

Dejá una respuesta

Compartí esta noticia

Suscribite a El Estratégico

Más leídas

Noticias
Últimas

Nuevo acuerdo entre FAdeA y Flybondi para el mantenimiento de aeronaves Boeing 737 NG

FAdeA (Fábrica Argentina de Aviones "Brig. San Martín" S.A.)...

Continúan las modificaciones en el sector energético – Nuevas resoluciones del Gobierno

El Gobierno Nacional continúa con las modificaciones en el...

¿Qué implica la transformación de la Casa de Moneda en una Sociedad Anónima?

A través del Decreto 295/2025, el gobierno de Javier...