La ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, presentó formalmente su renuncia al cargo en el Poder Ejecutivo nacional de cara a su asunción como senadora el próximo 10 de diciembre, y dejó allanado el camino para que Alejandra Monteoliva, actual secretaria de Seguridad, asuma al frente del ministerio. El movimiento confirma la transición ordenada que el oficialismo venía preparando desde hace semanas y refuerza el mensaje de “continuidad doctrinaria” en materia de seguridad.

En un mensaje publicado en X, Bullrich agradeció al presidente Javier Milei “la confianza y el respaldo para sostener y ejecutar la doctrina de seguridad y orden que hoy prevalece en el país”, y acompañó el posteo con la carta de renuncia remitida a Casa Rosada. Desde el entorno presidencial dan por hecho que Monteoliva jurará el 10 de diciembre, en paralelo al inicio de la nueva composición del Congreso.
De ministra a jefa de bloque en el Senado
La salida de Bullrich del Ejecutivo está directamente vinculada a su nuevo rol legislativo: fue electa senadora nacional y se espera que encabece el bloque de La Libertad Avanza en la Cámara alta. En las últimas semanas, la dirigente ya mantuvo reuniones con sus futuros compañeros de bancada para coordinar la estrategia parlamentaria de cara a las sesiones extraordinarias de diciembre, donde el oficialismo buscará avanzar con el Presupuesto 2026 y un paquete de reformas clave.
En la carta enviada a Milei, Bullrich sostuvo que durante sus dos años al frente del Ministerio su tarea estuvo guiada por cuatro ejes centrales: “Cuidar a los argentinos, cuidar a quienes nos cuidan, enfrentar al crimen con decisión y recuperar el orden en las calles”. También remarcó el trabajo conjunto con su equipo político y las fuerzas federales “en cada operativo, cada decisión y cada batalla que dimos juntos por el país”. De cara a su nueva etapa, prometió defender “con la misma convicción los valores” que comparte con el Presidente y anunció que desde el Senado impulsará reformas orientadas a “instituciones fuertes, ley, orden y un país donde los argentinos de bien puedan vivir y progresar en libertad”.
Qué cambia y qué se mantiene en política de Seguridad Nacional
La designación de Alejandra Monteoliva como reemplazo no sorprende dentro del esquema oficial. Actual secretaria de Seguridad y número dos del ministerio, Monteoliva fue una de las principales ejecutoras operativas de la estrategia de Bullrich, tanto en despliegue federal como en coordinación con provincias y fuerzas federales.

Fuentes del oficialismo señalan que no se esperan giros bruscos en los lineamientos centrales: se mantendrán el enfoque de mano dura frente al narcotráfico y el crimen organizado, el respaldo político a las fuerzas de seguridad y la prioridad en operativos de alto impacto en corredores críticos y zonas de conflicto urbano. En términos institucionales, la salida de Bullrich y la llegada de Monteoliva implican más continuidad que ruptura:
- Línea estratégica: se sostiene la llamada “doctrina de seguridad y orden”, basada en una presencia más visible de fuerzas federales, tolerancia cero al delito violento y coordinación con provincias en materia de narcotráfico y crimen organizado.
- Relación con las fuerzas: el Gobierno buscará preservar el mensaje de “respaldar a quienes nos cuidan”, que Bullrich enfatizó durante su gestión, manteniendo apoyo político frente a intervenciones sensibles y causas judiciales complejas.
- Agenda legislativa: con Bullrich en el Senado y Monteoliva en el Ministerio, la articulación entre la política de seguridad y el Congreso podría intensificarse, especialmente en proyectos de endurecimiento penal, lucha contra el narcotráfico y modernización de marcos normativos.
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