El vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció este jueves la decisión del Gobierno nacional de extender la edad máxima para incorporarse al Servicio Militar Voluntario de las Fuerzas Armadas Argentinas, entre otras medidas. No obstante, según pudo saber Zona Militar a través de fuentes consultadas de la cartera ministerial, la iniciativa plantea nuevas modificaciones.
Cabe destacar que el Servicio Militar Voluntario forma parte del régimen de incorporación previsto en esta ley desde el año 1994, y está dirigido a ciudadanos que deseen prestar servicio de forma voluntaria en el Ejército, la Armada o la Fuerza Aérea. El sistema actual contempla contratos de dos años renovables, con beneficios como cobertura médica, salario y acceso a cursos de capacitación, además de la posibilidad de continuar una carrera profesional dentro de la estructura militar.
El rol educativo
La reforma promovida por el Poder Ejecutivo bajo el Ministerio de Defensa se estructura sobre cuatro pilares clave. El objetivo es actualizar la reglamentación vigente, realizando cambios sobre la educación de los soldados, los oficios, el adiestramiento y la profesionalización.
Sobre el rol educativo, la medida busca fortalecer el nivel de formación de los soldados voluntarios. Se destaca que cerca del 50% de los soldados voluntarios no completaron el nivel secundario, una realidad que condiciona las posibilidades de inserción laboral.
En este contexto, el nuevo esquema buscará incorporar nuevos programas de finalización de estudios dentro del sistema. La meta principal es garantizar que todo aspirante acceda al título secundario como parte de su formación profesional y personal.
Oficios y profesionalización
Un punto focal de la nueva reglamentación recae en la certificación de oficios al momento de la baja, orientada a mejorar la empleabilidad de quienes culminan su ciclo como voluntarios. A grandes rasgos, apunta a vincular el paso por las Fuerzas Armadas con una salida profesional concreta.
El tercero de los pilares se relaciona con esto último, ya que está orientado a profesionalizar el escalafón interno. Con estos cambios, la finalización del nivel secundario será condición obligatoria para ascender de soldado segundo a soldado primero.
Se trata de un nuevo requisito que refuerza la importancia de la terminalidad educativa, además de que establece un estándar más elevado de formación para el avance dentro de la carrera militar.
Más adiestramiento
En último lugar, con el objetivo de elevar la calidad operativa del personal de tropa, la reforma también incluye una intensificación del adiestramiento militar. Tanto en aspectos físicos como técnicos, el adiestramiento ampliado contempla sólo tareas convencionales de defensa y una fuerte preparación para misiones subsidiarias (como incendios forestales, inundaciones, catástrofes naturales y asistencia comunitaria).
En conjunto, estas reformas orientan a una visión distinta en la concepción del Servicio Militar Voluntario, en un contexto en el cual el Gobierno impulsa múltiples iniciativas para reforzar la seguridad nacional y la defensa de los intereses argentinos. Sin embargo, hasta el momento no se han brindado mayores detalles sobre si esta ampliación vendrá acompañada de un aumento en el presupuesto destinado al sostenimiento del personal o de mejoras en las condiciones salariales, una gran incógnita dentro del personal castrense.
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