Esta semana, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) confirmó sus planes para reactivar la minería de uranio y el enriquecimiento en Argentina hacia el año 2026. En palabras del presidente de la CNEA, Germán Guido Lavalle, existen varios proyectos en evaluación, entre ellos la reactivación de la mina Sierra Pintada en Mendoza y el desarrollo de Cerro Solo en Chubut.
El funcionario también destacó que se esperan firmar acuerdos con empresas mineras para alcanzar este objetivo, acompañando la meta central de enriquecer uranio. Los comentarios fueron realizados el pasado viernes en un mensaje institucional por el Día Nacional de la Energía Atómica que contó con la participación del responsable del nuevo Plan Nuclear y presidente de Nucleoeléctrica, Demian Reidel y autoridades de otras empresas de la industria.
Un paso clave para la independencia energética, junto al Plan Nuclear Argentino
En paralelo a este objetivo central, el titular de la CNEA destacó cinco objetivos que la institución quiere cumplir en 2026: realizar la puesta en marcha (iniciar la operación) del reactor multipropósito RA-10, comenzar el reacondicionamiento de la Planta Industrial de Agua Pesada, realizar la puesta en marcha del Centro Argentino de Protonterapia, reactivar la minería de uranio y comenzar enriquecerlo, destacó el portal especializado EconoJournal.
Cabe recordar que la producción argentina de uranio cesó en 1995 con el cierre de la misma mina que hoy se busca reactivar: Sierra Pintada, Mendoza. Ahora, las iniciativas se condicen con el Plan Nuclear Argentino, impulsado por el gobierno de Javier Milei y liderado por Demian Reidel, que busca posicionar al país como una potencia en energía nuclear.
Desde su anuncio en 2024, el proyecto de Reidel ha estado enfocado en el desarrollo de reactores modulares pequeños (SMR) y en la consolidación de Argentina como un actor clave en el mercado de uranio. La iniciativa responde a la creciente demanda energética global, especialmente en sectores como la inteligencia artificial y los centros de datos, que requieren fuentes de energía confiables y sostenibles.
En la reciente “Conferencia Internacional sobre la Participación de las Partes Interesadas en los Programas de Energía Nuclear”, organizada por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en Viena, Reidel mencionó al Plan argentino y agradeció pública y especialmente al Director General del OIEA por el apoyo. Para Rossi, “los planes de Argentina para desarrollar SMR, aumentar la capacidad de uranio e impulsar la inteligencia artificial con energía nuclear demuestran compromiso” y recalcó la importancia de colaborar con las comunidades y los socios locales, en función de alcanzar dichos objetivos.
Desafíos y expectativas
Para Reidel, convertir a la Argentina en una potencia nuclear es un objetivo crucial. Ante un mundo en el cual la inteligencia artificial y los centros de datos están generando una demanda exponencial de energía, que supondrá una mayor demanda a nivel mundial, el país busca posicionarse estratégicamente.
Pero si bien el Plan Nuclear Argentino avanza con determinación, enfrenta desafíos importantes. Algunos de ellos recaen en la competencia internacional en el desarrollo de SMR y la necesidad de inversiones para modernizar la infraestructura nuclear.
Sin embargo, con la reactivación de la minería y el enriquecimiento local, el gobierno busca reducir la dependencia del exterior y seguir fortaleciendo la industria nuclear nacional.
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