El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, reconoció públicamente que está aplicando el plan del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para la Franja de Gaza, al tiempo que lo pone como una condición clave para terminar la guerra. La declaración se produjo durante su primera conferencia de prensa en cinco meses, que tuvo lugar el miércoles 21 de mayo, en la que también indicó que este plan es una condición necesaria para poner fin a la guerra.

“El plan de Trump es brillante. No solo no lo rechazo, sino que lo estoy implementando”, afirmó Netanyahu ante los medios. Además, destacó que el mismo “realmente puede generar un cambio no solo aquí… sino que puede transformar la faz de Oriente Medio. Cambiar de una vez por todas lo que hemos sufrido en Gaza durante décadas”. Esta es la primera vez que el primer ministro israelí se expresa de manera tan clara sobre su adhesión al proyecto del mandatario estadounidense.
El plan, anunciado por Trump en febrero de este corriente año, contempla la reubicación temporal de una parte significativa de la población civil de Gaza hacia países vecinos como Egipto y Jordania. Asimismo, propone transformar la Franja en una “Riviera del Medio Oriente”, con apoyo económico de Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, en el marco de un eventual acuerdo regional.

Netanyahu también reveló que su gobierno y el de Estados Unidos están trabajando en un esquema de distribución de ayuda humanitaria para Gaza. Este mecanismo excluye a las agencias de Naciones Unidas y prevé que empresas privadas estadounidenses se encarguen de la tarea.
¿Netanyahu más cerca de Estados Unidos y lejos de Europa?
Por otra parte, cuando se le preguntó sobre los informes de una supuesta ruptura entre él y Trump, el funcionario israelí afirmó que las relaciones de su país con la Casa Blanca son positivas. Y añadió que tanto Trump como el vicepresidente estadounidense, JD Vance, le aseguraron en los últimos días que Estados Unidos respalda a Israel.

Estas declaraciones se producen en medio de una renovada – e intensa – ofensiva militar israelí en Gaza y de crecientes críticas internacionales por la situación humanitaria en el enclave palestino. La implementación del plan de Trump podría representar un giro significativo en la estrategia del Gobierno israelí para el futuro de la región, mientras que en simultáneo lo alejan de Europa.
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